Saturday, August 22, 2015

IntensaMente

Camino a la madurez
Control y descontrol de las emociones

Ricardo Martínez García

Pete Docter, cineasta responsable de Up y de Monsters Inc., presenta en esta nueva cinta animada, IntensaMente (Inside Out, 2015), una divertida y reflexiva historia, la historia del desarrollo de nuestras emociones.

A partir del relato particular de lo que le ocurre a la feliz Riley, una vez que su padre decide dejar su hogar en Minesota, donde Riley tiene su vida, sus amigos, es parte del equipo local de jockey sobre hielo, y una serie de actividades, para ir a vivir a San Francisco, donde todo es diferente para ella, nueva escuela, amigos, situaciones familiares, etc., Docter nos muestra de manera imaginativa y divertida los estados de ánimo que van generándose en la personalidad de Riley.

De este modo, vemos desfilar en sucesión a Felicidad, Tristeza, Furia, Desagrado y Miedo como pequeños personajes que van tomando el control de las acciones y decisiones que, según el caso, va tomando Riley. Estas pocas emociones, cinco básicas del ser humano, son representadas de tal modo que resultan sumamente divertidas, pues una vez que toman las riendas de la acción de las personas, vemos cómo Riley, y en general todos, estamos bajo su dominio, y son lo que los filósofos llaman las pasiones humanas.

Riley se enfrenta a nuevas situaciones, las cuales le producen nuevas emociones, o la revisión de las antiguas y conocidas que tuvo en su lugar de origen. A medida que la historia de su nueva vida avanza, también la representación de sus emociones crece y se vuelve más compleja.

El guión, escrito por el mismo Docter y por Meg LeFauve, apela a conceptos más complejos propios de las teorías psicocognitivas, como las estructuras básicas de la memoria o de recuerdos centrales, categorizados en Familia, Amistad, Empatía, Compañerismo, etc., que Riley irá desfragmentando o destruyendo, para luego volver a configurarlos, pasando por un proceso que, en la representación imaginaria, se propone como una carrera de obstáculos de las emociones más básicas, para evitar que todo el aparato de recuerdos desaparezca. Este proceso pasa por la capacidad de procesar y abstraer las vivencias, de superar ciertas nociones propias de la infancia para pasar a las siguientes etapas del desarrollo humano: la pubertad.

Al público infantil seguramente le gustarán las escenas del viaje que emprenden Felicidad y Tristeza y la criatura imaginaria que las acompaña, con el fin de evitar que los recuerdos centrales de la Familia también queden destruidas, y al público adulto les resultarán divertidas algunas escenas entre los padres de Riley.

IntensaMente es una cinta disfrutable y a la vez reflexiva sobre los cambios que conducen al desarrollo de las emociones, para alcanzar lo que se llama madurez, en el mejor de los casos.

La noche del demonio Capítulo 3

El que busca encuentra.
Búsqueda peligrosa

Ricardo Martínez García

El tercer episodio de esta franquicia de terror es una precuela, en la que el director debutante Leight Wannell se centra en la historia de la psíquica Elise Rainier (Lyn Shaye) y del caso que la regresó de su retiro voluntario.

Sin el aspecto novedoso de la primera cinta, ni del seguimiento que se hace de la historia en la segunda, en las cuales la familia Lambert lucha contra una entidad maligna que se niega a despegarse de ellos, en esta tercera cinta el caso gira en torno a la joven Queen Brenner (Stephanie Scott), quien desea entrar en contacto con el espíritu de su madre recién fallecida.

La psíquica o vidente Elise es consultada por Queen, quien le revela que ha tratado de entrar en contacto con su madre por su cuenta. Lo que ignora Queen es que no es su madre quien responde a tal búsqueda o invocación, y lo sabrá del modo más desagradable y terrorífico posible.

Elise en un principio se muestra renuente a ayudarla, sabedora de que con las entidades del más allá no se juega, pero la intervención del padre de Queen, Sean Brenner (Dermot Mulroney) y su propio don visionario la impelen a ayudar a la joven en apuros.

El estilo de dirección de Wannell se acerca al nivel mostrado por las cintas anteriores, ambas dirigidas por James Wan (quien es director de El Conjuro y Rápidos y Furiosos 7, entre otras, y de quien Wannell es amigo y cercano colaborador como guionista), pero sí mantiene el toque sobrio, sin demasiados efectos especiales, y esa interesante representación del más allá como una especie de lugar oscuro y vacío, donde es posible encontrar la casa de la familia Brenner parecida a la real pero claramente en otro plano, siniestro y habitado por fantasmas, al que Elise tiene acceso solo en trance y gracias a su don vidente. Lo anterior no es extraño, si tenemos en cuenta que Wannell ha sido el guionista y creador de los personajes de los tres capítulos de esta franquicia.

El trabajo actoral es correcto, sobre todo de la joven Scott y de Mulroney. En el caso de Lyn Shaye con ciertas exageraciones, propias del género.

El director Wannell y el productor Wan aparecen de modo breve en la cinta, Wannell como Specs, quien junto con Tucker (Angus Sampson) y la propia Elise, crean el equipo de cazafantasmas que al final se integra, y Wan aparece como el director teatral ante quien Queen hace una presentación actoral.

Se trata de una cinta entretenida pero que muestra pocas novedades respecto a las anteriores, por lo que es recomendable sobre todo para quienes son adeptos a este género y en especial a esta franquicia.