Wednesday, December 17, 2014

Anabelle

Expectativa de sobresaltos
Era solo una muñeca

Ricardo Martínez García

Beneficiaria de una expectativa interesante al ser anunciada como la precuela de El Conjuro (James Wan, 13), aquella exitosa cinta de terror presumiblemente basada en hechos reales consignados por el matrimonio Warren, la cinta Anabelle (John R. Leonti, 14) no alcanza a cubrir tales expectativas generadas.

A pesar de contar con una narración fílmica pulcra y sin excesos visuales en efectos especiales, la cinta no logra horrorizar de lleno a la audiencia, ávida de imágenes escalofriantes como las vistas en otras cintas del género, como La noche del demonio (10) y la propia El conjuro (13), ambas dirigidas por James Wan, quien también es productor ejecutivo de la serie televisiva American Horror Story, y de Anabelle.

La propia naturaleza de ser un caso examinado secundariamente en El conjuro, pero ahora como historia central de esta cinta parecería hacer de Anabelle una historia más apoteósica si cabe la palabra.

Mia y John (Anabelle Wallis y Ward Horton) son un joven matrimonio que sufren el allanamiento de su casa por parte de un par de fanáticos de una secta satánica. La policía da muerte a ambos, pero en ese acto al parecer hay una transferencia sobrenatural hacia una muñeca, Anabelle, parte de la colección de Mia.

A partir de ese momento comienzan a ocurrir extraños hechos relacionados con la muñeca, aunque Mia tarda en hilar tal relación. Cuando lo hace, recurre a la ayuda de una nueva amiga, propietaria de una librería esotérica, Evelyn (Alfre Woodard), y de un sacerdote católico, el padre Pérez (Tony Amendola), quienes intentarán ayudarla.

En El Exorcista (Friedkin, 73) el padre Merrin (Max Von Sidow) termina por sacrificarse por la víctima poseída; en El Conjuro son los Warren (Vera Farmiga y Patrick Wilson) quienes ponen a salvo a la familia en problemas; en Anabelle también se sacrifica alguien por el bienestar de la familia, siguiendo un modelo de personajes buenos y malos, manifestación de la vieja dualidad bueno y malo. Esperemos que el bien siempre triunfe, y si lo hace espectacularmente, qué mejor.


La Dictadura Perfecta

Al mejor postor
Presidencia a la venta

Ricardo Martínez García

En otras circunstancias, la cinta de Luis Estrada, La Dictadura Perfecta, sería hilarante en cierto modo y en ciertas escenas, pero en el contexto actual, en el que se está viviendo una crisis más, política y de credibilidad en las instituciones, exacerbada por los actuales acontecimientos en Ayotzinapa y la corrupción en los más altos círculos políticos y empresariales, con pequeños botones de muestra como la llamada “casa blanca” de Peña Nieto, o las trapacerías de diputados panistas, perredistas y priístas, hacen de esta cinta un motivo más bien para la vergüenza ajena y propia, poco motivadora de carcajadas y más apta para el pesimismo y la desesperanza.

La clave argumentativa de la cinta está en el manejo de imagen que puede hacerse desde la televisión mexicana y (desde su amplia red de asociados), verdadera detentadora del poder económico y político. Los ejecutivos de producción, sabedores del poder que genera el uso eficiente de una “agenda setting” en los noticieros de alcance nacional, adecuada a las necesidades del cliente político en turno, diseñan los temas del debate político que pueden encumbrar o aplastar cualquier prestigio personal o institucional.

En un vaivén entre la carcajada y la indignación, vemos referencias al caso del señor de las ligas, René Bejarano, en plena avidez de dinero, o la manera en la que se han gestado campañas electorales que encumbran a políticos deshonestos, que se creen dueños de sus estados, que hacen y deshacen a su antojo (como lo muestra el reciente caso de Ángel Aguirre y José Luis Abarca). También vemos a un presidente copetudo afirmar en inglés chistoso que los mexicanos hacen en Estados Unidos trabajos que ni los negros quieren hacer, matando dos pájaros en una sola escena al hacer referencia a Peña Nieto y a Vicente Fox.

Carmelo Vargas (Damián Alcázar), gobernador de algún estado norteño, es sorprendido en el momento de recibir un maletín de dinero. El video es filtrado a la televisión por el líder de la oposición en ese estado, Agustín Morales, (Joaquín Cosío). Al intentar detener la bola de nieve mediática que se le viene encima, Vargas hace un oneroso contrato con la Televisión Mexicana, en primera instancia para lavar su imagen, y en segunda, buscando, desde la televisora, una postulación para “la grande”, en lo que representa un chiste sin chiste, dadas las semejanzas con la realidad.


Con una excelente dirección y producción, esta cinta de Luis Estrada, que también ha dirigido La Ley de Herodes (99) y El Infierno (10), ha sido elegida para representar a México en los Premios Goya 2015.

Wednesday, November 26, 2014

Drácula, La Historia Jamás Contada

La Humanización del Mito
El precio del amor desmedido

Ricardo Martínez García

El vampiro más famoso del la historia literaria es nuevamente el protagonista de esta cinta, Drácula, la Historia jamás Contada (2014) dirigida por Gary Shore, con grandes dosis de romanticismo, acción y efectos especiales, fotrografía muy buena y protagonizada por Luke Evans, Sarah Gadon y Dominic Cooper.

Esta historia no contada es la profundización y recreación de una pequeña parte de la historia que sí cuenta Bram Stocker en su clasica obra. En el texto de la novela de Stocker, el protagonista Jonathan Harker describe en su diario la zona geográfica de los Cárpatos, y al conglomerado étnico que la habita. Harker le pregunta por algunos temas al Conde Drácula, una vez que está hospedado o prisionero en su castillo, y el Conde le ofrece algunas pistas de su origen.

“¿Quién fue sino uno de mi propia raza que bajo el nombre de Voivode cruzó el Danubio y batió a los turcos en su propia tierra?... ¡No fue, pues, este Drácula, quien inspiró a aquel otro de su raza que en edades posteriores llevó una y otra vez a sus fuerzas sobre el gran río y dentro de Turquía; que, cuando era derrotado regresaba una y otra vez, aunque tuviera que ir solo al sangriento campo donde sus tropas estaban siendo mortalmente destrozadas, porque sabía que sólo él podía garantizar el triunfo!”

Esa pregunta y afirmación de Drácula constituyen el punto de arranque argumentativo de la cinta, en la que vemos la historia, efectivametne no contada, del gran amor de Vlad (Evans) el empalador por su esposa e hijo, así como su fiereza al luchar por su pueblo y defenderlo de los invasores turcos en el siglo XV. Vemos cuando realiza un trato con un ser tenebroso, al que se encuentra por casualidad, pero que convence de que le otorgue sus poderes extraordinarios. Es la clásica historia de un hombre agobiado que vende su alma sin saber las enormes y siniestras consecuencias, en un contexto histórico entre real y ficticio.


La cinta, de manera entretenida, logra hacernos empatizar con el personaje, entender sus razones y compadecerlo. No es el caso del Drácula literario de Stocker, que desea extender su territorio de caza, pasar inadvertido, siendo un ser solitario pero a veces convirtiendo a seres débiles a su misma condición y al que hay que exterminar, pero ésa es otra historia.

¡Ahí está el detalle!

Siempre Cantinflas
Gran bailarín

Ricardo Martínez García

Con una efectiva narración sobre dos momentos en la vida del famoso mimo, la cinta de Sebastián Del Amo muestra la manera en que Mario Moreno deviene en su álter ego, Cantinflas, en las carpas de la ciudad, hasta llegar a su momento cumbre, su incursión, breve pero significativa, en la meca del cine norteamericano, en Hollywood, en la década de los 50´s.

El surgimiento del personaje y la preparación de la filmación de La Vuelta al Mundo en 80 días (1957, Michael Todd), así como su labor sindical en favor de su gremio y las fundaciones de instituciones de ayuda, sus romances y matrimonio son algunos momentos biográficos de Cantinflas y su álter ego, Mario Moreno Reyes, en esta entretenida cinta, protagonizada por el cumplido actor español Óscar Jaenada.

La capacidad de improvisación fue un sello característico de Cantinflas el actor, quien hacía alarde de una agilidad mental expuesta en sus prontas y ocurrentes respuestas, tan propias de los sketchs de sus días de trabajo en las carpas.

Asistimos en la cinta al empoderamiento de Cantinflas de su entorno cinematográfico, al darse el lujo de prescindir de ciertos papeles o de despedir directores, así como de sus conflictos con su esposa de origen ruso, que son aspectos que dibujan la gran personalidad que poseía el comediante más querido en México, España y Latinoamérica, según le dicen a Michael Todd, el director de La vuelta al mundo en 80 días.

La cinta de Del Amo es divertida, está bien producida y las actuaciones, sobre todo de Jaenada, son bastante convincentes. Logra ofrecer una sensación de familiaridad (es difícil no haber visto en nuestro país ninguna película de Cantinflas, o conocer al personaje), ver la cinta es como saludar a un viejo amigo, al que hace mucho no se ha vuelto a tratar.


La escena final de este filme resulta una excelente recreación de aquel baile en El Bolero de Raquel, que muestra las dotes dancísticas de Jaenada. La carrera de Mario Moreno no se terminó en 1957, sino que continuó hasta 1982, año en que salió su última cinta, El Barrendero, y luego participó en dos cintas animadas, dándole voz a su personaje de toda la vida. En ese lapso, hubo cintas memorables como El padrecito (64), Su excelencia (66) y Agente XU 777 (63).

Tuesday, November 25, 2014

Lucy

Evolución explosiva
El máximo narcótico

Ricardo Martínez García

El uso de drogas y alucinógenos en las culturas tradicionales tienen por lo general intenciones místicas, de unión con la naturaleza o con deidades que de otro modo estarían fuera de alcance para los seres humanos. Pero en la actualidad son también una vía de escape de la realidad, una lúdica manera de concebir el mundo. O tal vez algo más.

La nueva película del realizador y productor francés Luc Besson, Lucy (14), protagonizada por Scarlett Johansson, nos muestra a una norteamericana que es secuestrada por una banda taiwanesa de narcotraficantes y es usada para transportar en el interior de su cuerpo cierta cantidad de una nueva droga sintética, que promete ser de gran potencia estimulante.

Hasta ahí la historia parece convencional, pero al ser golpeada por unos hombres, la carga que lleva en el interior de su vientre comienza a ingresar al organismo de Lucy (Johansson), y los efectos comienzan a hacerse patentes.

Al mismo tiempo vemos cómo un científico (Morgan Freeman) ofrece conferencias sobre el uso del potencial cerebral del ser humano, que en las personas comunes y corrientes alcanza apenas el 10 % de su capacidad. Este científico especula sobre lo que pasaría al incrementar tal potencial, sugiriendo el surgimiento de nuevas y poderosas habilidades en quien lograra tal incremento. Lucy, como conejillo de Indias involuntaria, alcanza pronto un nivel de consciencia insospechado y habilidades fuera de lo natural.

La cinta en términos de escenas de acción, persecución en autos, coreografías de artes marciales, no es muy diferente de las protagonizadas por ejemplo por Jason Statham como la serie de El Transportador (cuyo productor es el mismo Besson), y tiene una buena dosis de entretenimiento.

En lo que es diferente la película es en la idea de que al incrementar la capacidad cerebral, al llegar al 100%, el ser humano es tan consciente de todo y de poderes tan amplios, que alcanza su máximo (de manera regresiva) justo en el instante en que el universo se crea, y lo trasciende. La ciencia ficción entonces se vuelve la clave, vía la analogía, para entender conceptos abstractos como el origen del universo, la noción de Dios, la existencia y lo primigenio. O tal vez para confundirlos.


La cinta tiene el sello Johansson, es decir el sello del trabajo de una de las mejores y más versátiles actrices de la actualidad. Su presencia escénica suple casi cualquier deficiencia que tenga la cinta, que las tiene, añadiéndole un plus tanto visual como dramático, que en el cine es esencial. Buena elección la que hace Luc Besson.

Más negro que la noche

Nostalgia o carencia 
Reciclando el miedo

Ricardo Martínez García

En 1975 el director Carlos Enrique Taboada presentó la cinta “Más negro que la noche”, en la que una rica anciana hereda a su sobrina su mansión, con la condición de que cuide de su gato. La cinta estaba protagonizada por Pedro Armendáriz Jr., Lucía Méndez, Claudia Islas, Susana Dosamantes y Helena Rojo.

Este año Henry Bedwell dirige un remake de aquella cinta, que consolidó a Taboada como el máximo exponente del género de suspenso o de terror en nuestro país, luego de sus cintas El espejo de la Bruja (62), Hasta el viento tiene miedo (68) y El libro de Piedra (69).

La nueva versión de Bedwell cuenta con una buena escenografía y ambientación (la enorme y descuidada mansión de aspecto lúgubre, de una riqueza fastuosa que vio mejores tiempos; una ama de llaves siniestra y mandona), con adecuados efectos especiales (sombras que recorren pasillos, figuras en pinturas que cobran movimiento), pero carece originalidad, al ser predecibles los momentos climáticos de la historia, al menos para cierto sector de los espectadores. El trabajo actoral inicia tibio, mejora un poco al comenzar las acciones terroríficas, pero no va más allá e incluso queda a deber.

Bedwell ha dicho que quería homenajear el trabajo de Taboada, pero ¿por qué homenajearlo con un remake, que difícilmente podría superar el trabajo de la cinta original, y ya considerada clásica de nuestra cinematografía? Además la tendencia al remake, ya mostrada por El libro de Piedra del 2009, y del Hasta el viento tiene miedo, del 2007, solo ha dejado claro que difícilmente se pueden superar los trabajos originales, o que se teme apostar o arriesgar por proyectos originales e irse por lo seguro, es decir usar un guión que mostró ser exitoso, pero a costa de la pérdida de novedad.


Sería interesante ver a Bedwell, o a Guillermo del Toro haciendo una adaptación fílmica, por ejemplo, de El legado Peabody, o de cualquier relato incluido en el libro “La habitación cerrada”, de H.P. Lovecraft y August Derleth, o llevar a las salas algún buen relato de terror inédito, escrito por un mexicano. Eso sí sería novedad.

Tuesday, September 16, 2014

Se levanta el Viento


De amores de la vida
Hay que vivir

Ricardo Martínez García

Hayao Miyasaki explora en esta cinta la relación entre la creatividad pura y el uso político y militar que se le puede dar. Se Levanta el Viento (2013) se ubica en los años entre la Primera y la Segunda Guerra Mundial, y es una visión que oscila entre lo poético y la crítica social.
Japón tiene la necesidad de buenos ingenieros y diseñadores, y Jiro Horikoshi ha soñado desde niño construir y diseñar aviones. La cinta cuenta la manera en que Horikoshi hace realidad sus sueños, vemos cómo asciende en su carrera como ingeniero aeronáutico, hasta construir un extraordinario avión, veloz y eficiente.
Miyasaki desea mostrar, del mismo modo, el contexto real de la situación social, política y militar de Japón en ese periodo previo a la Segunda Guerra Mundial. Al mismo tiempo, el espectador asiste a la vida personal del protagonista. Con gran maestría narrativa, vemos cómo Horikoshi conoce y se enamora de quien será su esposa, Naoko Satomi, así como su empeño en el estudio y su viaje a Alemania, aliado militar de Japón.
Fantasía y realidad
Horikoshi destaca pronto entre sus colegas en la empresa Mitsubishi y comienza a dirigir importantes proyectos aeronáuticos, teniendo como clientes primero al ejército y luego a la marina de su país.
Alejado de la extraordinaria ficción de sus cintas anteriores, no obstante hay algunos temas recurrentes que revisa Miyazaki, como la guerra, la destrucción, la aviación, la bondad, el amor y la humanidad, tal como hizo en El Increíble Castillo Vagabundo (2004), donde Howl es un brujo que es obligado a luchar a favor del emperador, o en Porco Rosso (1992), en la que un piloto hechizado hace de las suyas con su avión.
Se trata de una hermosa cinta de animación biográfica de gran hechura y que destaca el momento culminante en la carrera del ingeniero Jiro Horikoshi, famoso por haber diseñado los aviones caza Mitsubishi A6M Zero, sin perder de vista el hecho de que hay que seguir viviendo, aunque el viento se levante.

El violinista del diablo

Talento musical fuera de serie
De talento natural

Ricardo Martínez García

El director británico Bernard Rose muestra en esta cinta de época parte de la vida de Niccolo Paganini, durante sus giras a París y Londres. El retrato que hace del genial violinista, compositor y músico, lo colocan como una especie de rockstar de la década de los 30 del siglo XIX, lo mismo con detractores que entusiastas seguidoras.
Paganini (David Garret) tiene un talento tal que ni siquiera necesita ensayar, y su fama como ejecutante del violín es de una naturaleza que genera el rumor de cierta influencia diabólica en él (de ahí el título de la cinta). Pero lo que se muestra es que como una especie de Fausto, Paganini se pone en las manos de un mefistofélico pero efectivo promotor, el signore Urbani (Jared Harris), quien es el que maneja sus presentaciones y contratos, pero hasta ahí la referencia diablesca.
Durante la gira que realiza por Londres, Paganini se enamora de una cantante de ópera, Charlotte Watson (Andrea Deck), hija del empresario que lo lleva a la capital inglesa, y comienza una historia de amor.
El nombre de Paganini era relacionado insistentemente por la prensa con escándalos debido a su debilidad por las mujeres y por sus excesos. No obstante, el escepticismo y la desconfianza hacia su persona se desvanecen al escucharlo tocar el violín.
Paganini se gana a todas las audiencias tan pronto lo escuchan, sea en una taberna de mala muerte, o en el mejor de los teatros. Estas escenas en la película son magníficas, pletóricas de pasión musical y talento. Al final, como todos, Paganini enferma y muere, pero su música permanece viva.
Rose, que además de director es el guionista de la cinta, muestra la experiencia que obtuvo cuando dirigía videos musicales para MTV en los ochenta, con grupos como UB40 y Frankie Goes to Hollywood, o músicos como Roger Waters. Por su parte, David Garrett es un gran violinista y compositor, discípulo de Itzhak Perlmann; una de sus grabaciones lleva por título “Rock Symphonies”. La unión del director y este músico y actor alemán crean el deleite musical de esta disfrutable e interesante cinta, además claro de la historia dramática.
Por cierto, Garret estará en México, ofrecerá un concierto en noviembre, los días 18 y 19 en el Auditorio Nacional.

Bajo la Misma Estrella

Vivir y morir

Ricardo Martínez García

De vez en cuando aparecen cintas en la cartelera que nos recuerdan nuestra condición de mortales, y lo agradable que resulta vivir. La cinta Bajo la misma estrella (14), del director Josh Boone nos muestra una serie de situaciones en las que los protagonistas luchan por vivir una vida lo más normal posible, pero sabiendo que por su condición de salud no tendrán las mismas oportunidades que los demás. La cinta está basada en el libro de John Green titulado The Fault in our Stars.

Hazel (Shailene Woodley) es una adolescente enferma de cáncer. Su deprimido estado de ánimo cambia radicalmente al conocer a Augustus (Ansel Elgort), a quien conoce en un fallido grupo de terapia. Tal relación cambiará la vida de ambos, al compartir no solo su condición de salud, sino su interés amoroso y gustos literarios.
El romance que surge entre ellos los lleva a enfrentar la vida de otro modo, que tal vez sólo el que se sabe condenado logra llevar a niveles más allá de lo común y cotidiano.  También los lleva a realizar un viaje a Holanda que los hará conocerse mejor y conocer otras concepciones de la vida.
La historia no puede sino ser dramática y culminante a la vez. El director narra eficazmente pero sin caer en el falso sentimentalismo el desenlace de la relación, que como un conjunto de cerillos que se encienden juntos, pronto también se consumen y se extinguen.
Se trata de una historia que conmueve y que nos recuerda o nos advierte de forma amable, dependiendo del modo que el espectador lo interprete, que todos en esta vida estamos condenados, con la diferencia de que algunos tienen más presente su propia e inminente mortalidad, y por ello anhelan no perder ni desperdiciar ni un minuto de su existencia.

X-Men: Días del Futuro Pasado

El ciclo del tiempo
Más allá de la ciencia ficción
Ricardo Martínez García
En esta nueva entrega titulada X-Men: Días del Futuro Pasado (14), el director Bryan Singer, que enfrenta en la actualidad una demanda por abuso sexual a un menor, presenta una cinta pletórica de efectos especiales, y de una compleja trama que incluye un viaje al pasado con repercusiones en el presente y futuro.
La historia gira en torno de Wolverine, el Doctor Charles Xavier, Magneto, Mystique, Storm, y Kitty Pryde. Al enfrentar una amenaza de destrucción definitiva generada de antaño, representada por el precursor de Styker, el doctor Bolivar Trask (Peter Dinklage), y a sus terribles creaciones, los Hombres X acudirán a los poderes teletransportadores (o de algún tipo de poder extraordinario) de Kitty Pryde, para enviar a Wolverine al pasado a que arregle los entuertos que en el futuro pueden causar la aniquilación total y definitiva de la especie mutante.
Más allá de los efectos especiales, fruto de la tecnología digital cada vez más avanzada, y de la ciencia ficción dramatizada y aplicada a la posibilidad de viajar al pasado para mejorar el futuro, la cinta es una metáfora del deseo de ciertos sectores de la población por eliminar a otros sectores, a los que temen y desprecian.
La trama recuerda dolorosamente la real segregación, la discriminación y eliminación hacia grupos de personas a lo largo de la historia (representados por los X-Men), por parte de otros grupos, con ejemplos como el nazismo, el Apartheid y la discriminación racial, y la configuración de un estado político militarizado y tiránico (representado por el personaje Bolivar Trask y su influencia en la ficticia política segregacionista).
El estoico y poco tolerante Wolverine (personaje que cada vez más justifica su propia saga de cintas) realiza un divertido y revelador viaje al pasado. Así, su relación con los demás personajes va marcando la pauta del ritmo de la cinta.
¿Qué mas queda por mostrar en la siguiente entrega de esta serie, que lleva por título X-Men Apocaypse, y que se estrenará en el año 2016, según prevén los estudios de cine que la producirá? La franquicia cinematográfica de ciencia ficción sobre los mutantes con súper poderes representa en la actualidad una veta muy rica, pero tal vez pronto a terminar. Los guionistas tendrán que trabajar bien y mucho, para dejar satisfechos a los fans de esta exitosa y ya larga saga.

Saturday, September 13, 2014

Sueños de Libertad

A veces el sueño es falso
Ilusión y pesadilla
Ricardo Martínez García
La búsqueda de un futuro mejor, el cambio de residencia por un lugar que pareciera prometer paz y prosperidad, así como el sueño de una vida mejor ha impulsado, a lo largo de la historia, a millones de personas en el mundo a lanzarse a la aventura y establecerse en otro lado.
La película de James Gray, “Sueños de Libertad” plantea el caso de una mujer polaca, Eva Cybulski (Marion Cotillard), quien junto con su hermana, deciden ir a buscar un futuro promisorio a los Estados Unidos, luego de que Europa ha experimentado los horrores de la Primera Guerra Mundial.
Desde finales del siglo XIX y hasta el XXI los Estados Unidos de América han representado para europeos, latinoamericanos, africanos y asiáticos ese lugar de las grandes promesas, la libertad y el progreso. Algunos cuantos han corrido con suerte y han logrado triunfar, establecerse y vivir el sueño americano, pero otros muchos han fracasado o se han quedado en el camino en el peor de los casos, encontrando solo sufrimiento o la muerte.
Eva y su hermana al llegar a Nueva York son procesadas como todos los que llegan, por el servicio de inmigración. La hermana de Eva es diagnosticada con tuberculosis, así que una vez que Eva llega a la gran metrópoli, ella no lo sabe pero su destino queda en manos de un tratante de blancas disfrazado de empresario de burlesque, Bruno (Joaquin Phoenix), quien se enamora de ella pero eso no le impide aprovecharse de ella.
El drama que plantea Gray en esta cinta de época está muy bien logrado, drama que oscila entre la ingenuidad de Eva, la codicia de Bruno y la competencia que representa para él su primo Orlando (Jeremy Renner), un mago que también se enamora de Eva. El desenlace plantea un nuevo comienzo para las hermanas, luego del desencanto y sufrimiento.
La recreación ambiental y escenográfica del Nueva York de ese entonces, con una fotografía en color cepia que pareciera transmitir los sentimientos de la protagonista son dignos de destacarse en esta cinta.


Al mejor postor

La apuesta más alta
Apuesta con traición
Ricardo Martínez García
Guiseppe Tornatore es uno de los directores más interesantes e influyentes de la cinematografía italiana en la actualidad. Su cinta Al Mejor Postor (13) es una muestra de la maestría dentro del ejercicio cinematográfico que ha alcanzado este cineasta, autor de obras como Cinema Paradiso, Una pura Formalidad y Malena.
Virgil Oldman (Geoffrey Rush) es un maestro de subastas de obra de arte, de muebles y antigüedades, que ha hecho de su oficio y modo de vida a su vez un arte, que aprovecha su conocimiento y maña para hacerse de una muy importante colección de obras de arte. Es un hombre soltero y demasiado poco afecto al contacto humano. Al verse impelido a entrar en contacto con una mujer enferma de agorafobia, su mundo se trastoca de un modo tan completo que nada puede volver a ser igual para él.
Si en Cinema Paradiso Tornatore ofrece un nostálgico homenaje a la cinematografía y a la manera de vivirla de un pequeño poblado, en Al Mejor Postor ofrece una cinta llena de simbolismos e imágenes muy cuidadas y hermosas.
Si el cine consiste en exhibir escenas para mostrar algo, esta cinta muestra cómo Virgil vive para coleccionar obras de arte y esconderlas (algo que recuerda a esos extraordinarios palacios romanos llenos de obras de arte, que lucen abandonados y en tinieblas, a los cuales muy pocos pueden acceder a ellas para admirarlas, como muestra otra gran cinta italiana, La Gran Belleza, de Paolo Sorrentino), tenerlas y atesorarlas para su disfrute personal.
El arte cinematográfico es una creación que presupone una cierta magia o prestidigitación, el director sabe a dónde quiere conducir al espectador y crea ambientes, diálogos, personajes, para llevarnos a un final que, en el mejor de los casos nos sorprende y agrada. Martin Scorsesse lo sabe y lo muestró en La Invención de Hugo, y lo sabe Tornatore. Hacer cine es como la construcción de un autómata del cual poco a poco se encuentran sus piezas, se embonan y se forma un cuerpo completo. El resultado final puede ser extraordinario o decepcionante, pero en todo caso plantea cuestionamientos que pueden dejar al espectador con una sana actitud reflexiva.
Virgil Oldman, así como el espectador, al final de la cinta quedará sorprendido por la muy intrincada y bien elaborada estratagema de la cual fue objeto.


Friday, June 20, 2014

El Gran Hotel Budapest

Humor y Estilo
Tradición y lujo cinematográfico
Ricardo Martínez García
Con una escenografía impactante, y un trabajo fotográfico excelente, la cinta de Wes Anderson, El Gran Hotel Budapest (14) es una película dentro de la mejor tradición de las grandes producciones, tanto por su realización como por su elenco y temática.
Sobesaliente tanto en argumento como en elaboración visual, con escenarios naturales y hasta maquetas muy bien hechas, la cinta narra la manera enla que Zero Moustafá (F. Murray Abraham, y Tony Revolori, de joven) se convirtió en el propietario de un hotel de gran tradición en la Europa oriental de antes de la Segunda Guerra Mundial.
Con gran ritmo, un fino y sutil sentido del humor y agilidad, somos testigos en esta cinta de una narración dentro de otra y dentro de otra, que como matrioskas rusas entretejen la historia de Zero y su jefe y amigo Mister Gustav (Ralph Fiennes en un trabajo estupendo), quien es consierge del Gran Hotel Budapest, en la convulsa Europa Oriental, y que destaca por su atención a la clientela.
La devoción de Mister Gustav hacia su trabajo lo lleva a complacer a sus clientes, especialmente mujeres, hasta límites muy personales. Eso hace que al morir la anciana duquesa Madame D. (Tilda Swinton), le herede sus bienes, por encima de sus propios familiares, lo que lo lanzará a una serie de intrigas, estancias en la cárcel y otras aventuras. La devoción hacia Mister Gustav, a su vez, de su lobby boy Zero, lo hará su inseparable en estas peripecias.

Con varias pequeñas subtramas, en las que intervienen actores de un excelente reparto, la cinta es disfrutable de principio a fin, en la que el espectador puede revivir su gusto y afición por cintas de buena calidad, entretenidas, ligeras pero a la vez con un cierto toque de sofisticación.  

Obediencia Perfecta

Asalto a la inocencia
Un tema muy espinoso
Ricardo Martínez García
La historia periodística que ha sido tomada como base para el argumento de la película Obediencia Perfecta (14) del director Luis Urquiza, comenzó con algunos reportajes publicados en el diario La Jornada en abril de 1997. Salvador Guerrero Chiprés publicó un reportaje en cuatro partes, en donde señalaba los abusos sexuales a niños de entre 12 y 17 años por parte del fundador de los Legionarios de Cristo, el sacerdote michoacano Marcial Maciel, a quien también se señaló como adicto a la morfina.
Lejos de pretender ser una cinta de denuncia, el cauto eufemismo de llamar en ella a la orden religiosa “Los Cruzados de Cristo”, y a su fundador como el sacerdote “Angel de la Cruz”, no logra ocultar las verdaderas identidades tanto de la orden como del defenestrado Marcial Maciel, quien en sus últimos años recibió la orden de Benedicto XVI, en 2006, de no ejercer más su ministerio sacerdotal, y a retirarse a la vida de oración y penitencia.
Juan Manuel Bernal interpreta de manera soberbia al sacerdote Ángel de la Cruz, superior de los Cruzados, seductor y manipulador consumado, al cual vemos en plena acción al convertir al niño seminarista (interpretado por Sebastián Aguirre) en su discípulo personal y amante.
La cinta de Urquiza muestra el dominio manipulador del padre De la Cruz, que hacía creer a los niños abusados sexualmente que lo que hacían con él era una muestra de devoción y amor hacia su persona y hacia la voluntad de Dios, que era una ayuda importante para su salud. La complacencia, casi complicidad, de los altos jerarcas de la Iglesia, hacia el estilo de vida de De la Cruz, muestra el cinismo del que sí sabe lo que ocurre, pero que no le conviene hacer algo por detenerlo.
La perfidia e hipocresía del sacerdote De la Cruz alcanza un grado superlativo, al repetir regularmente el proceso de seducción en otros nuevos e inocentes niños que ingresan a su orden. “No somos ángeles, cuiden a sus niñas”, etcétera, dijeron altos jerarcas al ser cuestionados por el caso de pederastia de Marcial Maciel. Es una manera cínica de dar un buen consejo.


El Crimen del Cácaro Gumaro

Homenaje al cine
Humor Estrambótico
Ricardo Martínez García
La unión de tres guionistas, cada uno poseedor de una vena (tragi)cómica diferente, da lugar a una película estrambótica, divertida a ratos, ácida, crítica e irregular. Tal es el caso de la cinta El crimen del Cácaro Gumaro, dirigida por Emilio Portes.
La cinta muestra escenas que van desde el humor más o menos blanco de Andrés Bustamante, en su personaje de Don Cuino, presidente municipal, en todo el estilo antipriísta de los supermachos de Rius, de un pueblito llamado Güépez, hasta el corrosivo sentido del humor de Armando Vega Gil, quien da vida a un párroco que se hace acompañar de un monaguillo por todo el pueblo, al que trae como si fuera su mascota.
La historia que se cuenta, la de un propietario de un cine que le hereda la sala a uno de sus hijos, expone las contradicciones inherentes a la industria de la cinematografía: para unos representa la creatividad, la tradición de la sala de cine, como un epicentro lúdico de la vida comunitaria, y la autenticidad de las películas vistas en el cine; para otros, las obras cinematográficas representan la fuente de la industria de la piratería, de la ganancia fácil y la ilegalidad.
La cinta es un conglomerado con diferentes tipos de intereses y resultados. Por una parte es un homenaje al cine mismo, a las buenas películas, con alusiones a Cinema Paradiso, o 9, y también a otras malas y a veces divertidas cintas japonesas al estilo de Godzilla, cintas de epidemias y zombies, cuya parodia es evidente. Es también un homenaje a las propias salas: el cine de Güépez se llama Linterna Mújica, evocando a la antaña sala Linterna Mágica, ubicada por el rumbo de San Gerónimo. Pero también es una crítica implícita a los propios exhibidores cinematográficos y a la industria botanera que gira en torno a los clientes-cinéfilos, y de paso a los políticos corruptos, encarnados en don Cuino.
El resultado es una cinta irregular y extravagante, pero que cuenta con algunos buenos momentos, por la crítica implícita, que también se hace de modo paródico.
Además de Bustamante y Vega Gil, participan en el reparto la bella Ana de la Reguera, Jesús Ochoa, Alejandro Calva (como Archimboldo) y Carlos Corona (como Gumaro), con breves participaciones de Javiér López “Chabelo”, Cármen Salinas, Jorge Rivero y Eduardo Manzano.

Divergente

Los alcances de la libertad
La libertad de elegir destino
Ricardo Martínez García
La película Divergente, del director Neil Burger, está basada en el libro de la joven escritora Veronica Roth, de 25 años, titulado Divergente, y cuenta con una secuela de dos libros: Insurgente y Lealtad, publicados en 2011, 2012 y 2013 respectivamente.
La historia está ambientada en alguna sociedad norteamericana después de una guerra masiva, y los sobrevivientes son organizados en facciones bien delimitadas. Cada facción social tiene sus respectivos roles, y cada miembro que nace y crece en ellos tiene oportunidad de hacer un examen de aptitud para determinar a qué facción quiere pertenecer, e incluso elegir, por única y primera vez, la facción a la que desean ingresar.
La película refleja las tendencias autoritarias de lo que se supone un gobierno racional, las contradicciones entre las habilidades naturales y el ejercicio de la libertad o la libre autodeterminación, o las que hay en torno a la vida organizada socialmente y la vida individual. Parecería que lo que se desea dejar en claro es el límite de los alcances de la libertad (elegir una de las facciones existentes y quedarse en ella) y su relación con la necesidad de control social, enfatizando los beneficios de tener una sociedad organizada casi mecánica o robóticamente. El orden social sobre cualquier otra cosa.
La historia se centra en Tris Prior (Shailene Woodley), en su novio Four (Theo James) y en aquellos que no encajan bien en ninguna de las facciones disponibles: Verdad, Erudición, Cordialidad, Osadía y Abnegación.
Al no encajar en ninguna de esas facciones, algunas personas son consideradas peligrosas, y por ello deben ser eliminadas, por poner en peligro ese orden social, tan arbitrariamente logrado.
Tal vez el espectador se pregunte por qué solo esas serían las facciones existentes, siendo que el ser humano es pluridimensional, pero esa es justamente la idea fascista: que el ser humano en realidad debe ser unidimensional, y por eso se le debe categorizar y conducir a alguna “facción”.
Por la temática y manera de abordarla, la cinta puede compararse con las de la serie de los Juegos del Hambre, incluso ambas series tienen como heroína a una joven adolescente, y tienen que luchar contra el sistema establecido.
Ubicada en un futuro próximo, las acciones están ambientadas en edificios ruinosos, con aire de abandono y de deterioro. Predecible hasta cierto punto, el resultado es una cinta entretenida y que da pie a algunas reflexiones, algo como lo que ocurre con cintas como Bee Movie o las citadas de la serie de los Juegos del Hambre.

Thursday, April 10, 2014

Reencuentro

¿Terapia fallida?
Rencores imborrables

Ricardo Martínez García

Dentro del marco de la Gira de Documentales Ambulante 2014, se presentó Reencuentro (Återträffen, 13) cinta que es una mezcla de documental y de proyecto fílmico personal realizado por la cienasta sueca Anna Odell.

No es una cinta sobre el amor o algún agradable sentimiento parecido, es sobre los recuerdos que una mujer (Odell) ha ido guardando, recuerdos sobre su infancia y adolescencia vivida con un grupo de compañeros escolares.

El proyecto fílmico de Odell pareciera haber sido concebido como una manera de buscar sanar viejos traumas y heridas, productos de un bullying padecido por ella largamente en un ambiente escolar. Odell, al no ser invitada a un reencuentro con sus excompañeros escolares, concibe y realiza un documental fundamentado en lo que recuerda de cada uno de esos compañeros. El guión de ese documental consiste en recrear, con actores y todo, el reencuentro al cual no fue invitada, presentando las posibles escenas que se hubieran dado si ella hubiera asistido.

El guión da un giro truculento al incluir entrevistas a los excompañeros reales de Odell, quienes son invitados a ver el documental, con las escenas de la reunión en las que aparece hipotéticamente Odell, generando diferentes resultados, que van desde el tibio reconocimiento hasta la fría indiferencia.

Algunas pesonas podrán superar una infancia traumática, pero otras no, y las diferentes formas de vivir con tales trauma definirán quiénes somos, parece ser un probable mensaje de este documental, dando pie a variadas reflexiones.

Ella

El amor es una idea
El amor en los tiempos de la realidad virtual

Ricardo Martínez García

¿Qué es el amor, cuál es su naturaleza, es algo real o ideal, algo físico o inmaterial? Esas podrían ser las preguntas que se derivan, luego de ver la cinta de Spike Jonze Ella (13) en la que un hombre se enamora de la personalidad artificial creada por un avanzado sistema operativo.

Contar con alguien que te escuche, que te entienda, que te aconseje, que se adelante a tus deseos o pensamientos y además organice tu vida en todos los sentidos, sería lo más maravilloso que pudiera suceder, y con toda probabilidad amaríamos a tal persona (o programa de software).

Theodore Twombly (Joaquin Phoenix en plan grande, entrañable) se dedica a escribir cartas para otras personas, pero todo cambia en su vida cuando instala un nuevo sistema operativo en su computadora, llamado OS1. Este nuevo sistema es super inteligente, perceptivo y aprende cosas que muestran una conciencia de sí mismo, una verdadera inteligencia artificial capaz de sentir, o al menos de dar todas las trazas de hacerlo.

Las razones por las cuales el amor que surge entre Theodore y Samantha, como se autonombra dicho sistema operativo (y que cuenta con la aterciopelada y femenina voz de Scarlett Johansson), comienza a fracturarse, implicaría manejar varias probables explicaciones, tan complejas como las que se usarían para explicar una atormentada relación entre seres humanos.

Jonze, quien además de dirigir escribió el guión, presenta una cinta emotiva, que va mucho más allá del mero proponer la vida de un obsesivo de la tecnología enamorándose de sus gadgets. Ambientada en una especie de mundo del futuro inmediato, la película nos muestra aspectos de la soledad, del aislamiento, de las vidas internas de las personas y de la forma de afrontar emociones y pensamientos, de tal manera que el espectador se ve reflejado inevitablemente en esas situaciones.


La Gran Belleza

La exquisitez fílmica
Vivir es la Gran Belleza

Ricardo Martínez García

Roma es una ciudad mítica en muchos sentidos, pero sobre todo está plagada de monumentos, hermosas fuentes, grandes colecciones de arte y turistas. Cada calle, rincón, restaurante, mueble, parecieran ser ejemplos de lo bello. Tal es lo que presenta visualmente La Grande Bellezza: es una continua estampa de escenas hermosas e impactantes.

Dirigida por Paolo Sorrentino, la película narra la historia de Jep Gambardella (el sensacional y sexagenario actor Toni Servillo), un periodista que en su juventud escribió una única novela, con la cual alcanzó cierta notoriedad, y que no ha podido escribir un segundo libro, pues su vida de sibarita de clase media alta lo han distraído (o sumergido) de lo que él llama “la gran belleza”.

La vida de Jep transcurre entre fiestas nocturnas, reuniones de amigos, entrevistas a personajes ilustres, siestas en su lujoso departamento, pero eso no parece ser lo esencial sino lo cotidiano. Jep es un sibarita pero también es un hombre culto, con inclinaciones hacia el hedonismo pero de actitud intelectual, un tanto cínica, y eso lo hace ser consciente de su propia vida, de la de sus amigos y de su vaciedad.

La cinta muestra los pequeños y grandes placeres del baile, los excesos y las fatuidades de ciertos personajes, la hipocresía y la indiferencia, la excentricidad del arte por el arte en colecciones a las que muy pocos tienen acceso, lo superlativo de la gran belleza que al fin es la nada.

Se trata de una obra maestra que fue nominada a la Mejor Película de habla no inglesa, o extranjera, en los pasados premios Óscar, ganándolo con todo mérito.


12 Años Esclavo

Historias no deseadas
Libre y esclavo a la vez

Ricardo Martínez García

El director Steve McQueen muestra en 12 Años Esclavo la crudeza de una realidad social en el pasado histórico de los Estados Unidos, específicamente en los llamados estados sureños (es decir los ubicados al sur del río Mississippi), donde se practicó regularmente el tráfico y propiedad de esclavos de origen africano entre los ricos terratenientes agrarios.

La cinta, ambientada en la década de los cuarenta del siglo XIX, está basada en un libro testimonial, escrito por el músico de raza negra Solomon Northup, quien tuvo la desgracia de caer en los engaños de unos supuestos empleadores, y verse convertido en esclavo, al ser secuestrado, trasladado y vendido en la ciudad de Nueva Orléans. El trato inhumano que se les prodigaba a los esclavos contrastaba fuertemente con la libertad de la que gozaba la población de raza negra, que vivía libre y emancipada en los estados del norte.

De modo dramático, la película muestra cómo la naturaleza humana de los esclavos era degradada a límites extremos por quienes se decían ser sus dueños, al tratarlos como objetos o, en el mejor de los casos, como animales de carga, haciendo uso de una violencia cruel, innecesaria y excesiva.

La abolición de la esclavitud en los Estados Unidos se produjo una vez que terminó la Guerra Civil norteamericana, en 1865. Abraham Lincoln había promulgado la Proclamación de Emancipación en 1863, y ésta se considera antecedente del movimiento por los derechos civiles. Tanto el periodo esclavista como el de la lucha por los derechos civiles de los afroamericanos representan dos situaciones históricas hirientes y dolorosas para Norteamérica, que aún supuran de vez en cuando, como lo muestra la filmografía sobre el tema.

La actuación de Chiwetel Ejiofor es sobresaliente, así como la de Lupita Nyong´o (ganadora del Óscar a mejor actriz de reparto), Michael Fassbender, Brad Pitt, Paul Giamati y Paul Dano.

No es una película de temática divertida ni palomera, sino una de las que toca las fibras sensibles de quien la ve, y que nos recuerda que el ser humano puede ser el peor enemigo del ser humano.


Dallas Buyers Club

Atrévete a vivir
La vida luego del SIDA

Ricardo Martínez García

Recibir la noticia de que se es positivo en VIH cambiaría la vida a cualquiera, tal vez negativamente, pero no ocurre eso con todos. Tal es el caso de Ron Woodroof, un trabajador en la industria petrolera texana, aficionado a los rodeos y al sexo de tendencia promiscua.

La cinta del director Jean-Marc Vallée, protagonizada por Matthew McConaughey y Jared Leto es la historia de un superviviente no solo del SIDA, sino del sistema de salud norteamericano, controlado por la FDA, o la Administración Federal de Drogas o medicamentos. Es una historia de coraje, de frustraciones, de lucha por la vida, de la toma de conciencia que poco a poco se produjo en torno a las condiciones que enfrentaron y enfrentan los enfermos con el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida.

Cuando Woodroof es informado de que sus pruebas del VIH resultan positivas, pasa por las fases de negación, enojo, depresión, pero él no se queda ahí, lo supera, y en el camino se hace comerciante de medicamentos, hasta llegar a fundar uno de los llamados clubs de compradores de medicamentos, de los que surgieron varios en los Estados Unidos. Tales clubes proveían de medicamentos, legales o ilegales a veces, a sus miembros, portadores del VIH.

Las actuaciones de McConaughey y de Leto han sido tan buenas para llevar a ambos a ganar los Óscares este año, como actor principal y de reparto respectivamente. El realismo con el que se desempeña cada uno de ellos va más allá de lo meramente histriónico, así que en ese sentido no ha sido sorprendente que los ganaran.

La película funciona como fuente de divulgación sobre esta enfermedad, así como una ácida crítica social, y en términos dramáticos resulta de gran convicción.

Saturday, February 15, 2014

El Lobo de Wall Street

La banalización del dinero

Ricardo Martínez García

La nueva cinta de Martin Scorsese trata de la vida de un antihéroe norteamericano de la vida real. Leonardo Di Caprio da vida a Jordan Belfort, corredor de bolsa de Wall Street que con todo desparpajo nos muestra a los espectadores los trucos para defraudar a personas que invierten en acciones de empresas fantasmas.

Basada en las memorias de este personaje de la vida real, Jordan Belfort, la cinta está plagada de acciones desenfrenadas, pues donde hay abundancia de dinero, sin importar su procedencia, se producen excesos que resultan chocantes para las personas comunes y corrientes, esas que no destacan porque son demasiado honestas, y en ese sentido aburridas a más no poder.

A ese grupo de personas pertenece el agente del FBI Patrick Denham (Kyle Chandler), quien se enfrasca en una investigación para desenmascarar a Belfort, que no desea, comprensiblemente, abandonar su estilo de vida.


Si bien las escenas divertidas y estrambóticas de la cinta casi siempre las protagoniza Belfort y su corte de colaboradores, encabezado por Donnie Azoff (Jonah Hill en plan grande), con orgías cada que logran vender acciones basura, también hay algunas escenas donde se atestigua el nivel de degradación al que llegan estos antihéroes de la cultura norteamericana.

El Juego de Ender

Juego o realidad
La vida es un juego

Ricardo Martínez García

La premisa general de la cinta El juego de Ender (13) del director Gavin Hood, es que los humanos intentan evitar que una especie alienígena inteligente, conocida como los Inséctores, invada y deje de ser una amenaza para la Tierra, y para ello se preparan para una guerra definitiva.

Ender Wiggin (Asa Butterfield) es un joven estudiante descubierto como un gran estratega bélico y es entrenado, a partir de juegos y simulaciones computarizadas muy reales, para la futura guerra con los Inséctores. Sus instructores son el coronel Graff (Harrison Ford) y el mítico Mazer Rackham (Ben Kingsley), además de la mayor Anderson (Viola Davis). Pero las habilidades de estratega de Ender van más alla de lo bélico, así como los juegos en los que se entrena.

Basada en la novela del mismo nombre, escrita por Orson Scott Card, la cinta va más allá de los meros planteamientos de la ciencia ficción (vuelos interespaciales cotidianos, armas de destrucción más que masiva, etc.) y explora los dilemas éticos implicados siempre en los conflictos bélicos. En este caso el enemigo es de naturaleza alienígena, pero no por eso deja de plantear interesantes reflexiones sobre el derecho a la vida y a la existencia tanto de unos como de otros. Ahí radica el valor dramático de la película, cuyo reparto hace muy bien su trabajo. Por otro lado, los efectos especiales pueden fácilmente competir con los que muestra la cinta Gravedad, de Alfonso Cuarón.

Orson Scott Card ha escrito la llamada Saga de Ender, con cuatro libros más que dan continuidad a la historia que comienza con El juego de Ender. Ha escrito además otra saga a partir de su libro La Sombra de Ender y cuatro libros más, conocida como la Saga de la Sombra, que es como la continuación de la Saga de Ender, así que con gran probabilidad veremos en un futuro cercano más cintas basadas en sus obras. Un elemento en común en las obras de Card es la preocupación por el medio ambiente y por la vida en general.

El guión de Hood no es exacto respecto al libro original pero sí ofrece la esencia de la historia de Card, quien tiene otros muchos libros de ciencia ficción y es un autor que ha ganado varias veces los premios Hugo y Nébula, dos de los más reconocidos en este género literario.